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Imagen: Personas de tercera edad |
Continuamos con la última de las entradas de la serie que comenta las dificultades experimentadas por las personas con discapacidad cognitiva a la hora de cruzar la calzada por un paso de peatones sin semáforo. Os recordamos que en entradas anteriores ya analizamos el 1º y el 2º de los cuatro problemas detectados:
1º Localización de los pasos de peatones
2º Visualización del límite entre acerado y calzada
3º Gesto de mirar a ambos lados antes de cruzar
4º Actitud de los conductores
3º Gesto de mirar a ambos lados antes de cruzar
Una vez que el peatón ha localizado el vado y se ha colocado en el borde del mismo con la finalidad de cruzar, surge la 3º dificultad; que consiste en recordar que es necesario mirar a ambos lados de la calle para ver si es posible cruzar o no, y que esa mirada sea efectiva.
Lo que para la mayoría de los ciudadanos es un gesto integrado en nuestro quehacer diario, para las personas con dificultades de entendimiento puede suponer un verdadero esfuerzo de memoria y atención. La ejecución de este gesto sería más sencilla con la puesta en práctica de las soluciones técnicas ya propuestas para solucionar la primera y segunda dificultad: señalización de la ubicación en acera, marca de bordillo y diseño adecuado del vado; ya que les ayudaría a distinguir este elemento como algo singular y diferente en el resto del entorno urbano, resaltando su importancia y reforzando la asociación con el gesto de mirar antes de cruzar. A modo de refuerzo, deberían disponerse textos o pictogramas en calzada y sobre soporte vertical, que recuerden la necesidad de mirar antes de cruzar.
La señalización por texto sobre calzada es una práctica ya utilizada en Córdoba con fines medioambientales, y fácilmente podría extenderse al ámbito de la accesibilidad universal, tal como lo hacen otras ciudades de la geografía española.
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Imagen: Texto sobre calzada en paso de peatones de Córdoba |
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Imagen: Texto sobre calzada en paso de peatones para prevenir la seguridad vial del peatón |
Para facilitar la comprensión del mensaje a las personas con dificultades cognitivas, sería preferible acompañar o sustituir el texto por pictogramas, tal como se puede ver en las siguientes imágenes.
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Imagen: Texto con pictograma sobre calzada en paso de peatones |
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Imagen: Pictograma sobre calzada en paso de peatones |
En cuanto a la señalización vertical destinada a los peatones, su contenido podría ser análogo al de la señal de tráfico que se utiliza para recordar a los conductores que tienen que apagar las luces tras un túnel, ¿o es que la posibilidad de circular con las luces encendidas es más peligrosa que el hecho de cruzar sin mirar? Parece que las prioridades no están bien definidas…
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Imagen: Señal vertical para recordar a los conductores sobre la necesidad de apagar las luces tras salir de un túnel |
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Imagen: Señal vertical para recordar a los peatones el peligro que entraña cruzar por un paso de peatones de manera inadecuada. |
4º Actitud de los conductores Y ya por último expongo la cuarta dificultad, que no se trata de un aspecto técnico sino de la actitud de los conductores ante el tiempo de espera para el cruce de peatones. Los problemas de comprensión de las personas con necesidades de apoyo cognitivo, sumados a la falta de un entorno accesible, hacen que la toma de la decisión de cruzar pueda ser más lenta que en el resto de peatones. Esto hace que la paciencia del conductor se ponga al límite, pudiendo llegar a situaciones de peligro en los que el conductor tras lo que considera una espera infructuosa, reinicia la marcha en el momento en el que la persona se decide a cruzar la calle.
Para solucionar este problema, no queda más que la sensibilización de la sociedad, que en la mayoría de las ocasiones desconoce el esfuerzo que algunas personas tienen que realizar para hacer algo que para otros es tan simple. Desde este blog, queremos colaborar en la concienciación de los conductores a través de la información que estamos facilitando en la serie de entradas “Algunas ideas para mejorar la accesibilidad cognitiva en los pasos de peatones I, II y III”. Esperamos os haya aportado algo nuevo, seguro que todos tenemos cerca niños o ancianos que también se podrían beneficiar de las medidas de accesibilidad propuestas; e incluso nosotros mismos, ¿o es que nunca hemos sido peatones apresurados?
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